
Ultimamente he estado con mucho y poco movimiento, algo difícil de explicar y mas difícil de creer. El problema es que mi cabeza hace más cosas que mi cuerpo, al cual lo saco a pasear de vez en cuando, pero básicamente estoy siempre dándole vuelta a las ideas, a los temas y a las cosas que algún día pretendo hacer. Es desgastante (mentalmente) porque muchas veces no tengo la claridad necesaria para hacer girar el tornillo y echar a correr la fabrica de ideas, he ahí... mi sequía intelectual, la que estos últimos meses me ha tenido presionando "inicio" en Facebook más veces que la gente normal, lo que desencadena la falta de creatividad que tanto me inundó durante un periodo de tiempo, y que sé aún vive en algún recóndito lugar de... mi... o de todos, mejor de todos para no ser tan ególatra, porque del todo voy a la nada y luego saco mis ideas absurdas y sin elaboración, que son las que alimentaban este botado blog.
Hoy, mientras escucho la banda sonora de Amelie, me dieron ganas de explicar que fenómeno pasa por mi cabeza cuando las ideas no están, o si, están, pero no de forma tangible sino que etérea y flotando por mi mente. Llegué a la simple conclusión de que estoy en un proceso de sequía ¿será el abuso de ciberdrogas? he pensado que si y creo firmemente en esa teoría.
Mientras deslizo mis dedos por este teclado, saltan sobre el mil ideas por minuto que pienso anotarlas para escribirlas más adelante, pero mi mente no tiene la agilidad de mis dedos, así que cada idea que salta rebota al suelo, espero retener más información pronto... como dicen todos... esto es un ejercicio y por más que odie la gimnasia, me acostumbrare a mover mis neuronas a la rapidez de mis dedos, aunque suene extraño, se que muchos me entenderán, porque no es falta de amor a mis escritos vagos, es falta de entrenamiento...
Puedo decir que tengo el mismo problema de Chile en Beijin 2008... pero a mi ¿quien me auspicia?